Por Ley 24.785 del año
1997 se estableció que el día 23 de septiembre de cada año en la República
Argentina se conmemore el “Día Nacional de los Derechos Políticos de la Mujer”
en homenaje a la sanción de la Ley 13.010 de septiembre de 1947, que estableció
el voto femenino.
Las primeras mujeres en
ocuparse por la lucha de sus derechos cívicos, y las primeras en organizarse
para ello, fueron las militantes del Partido Socialista y las Anarquistas de
comienzo del siglo XX. La lucha se centraba en conseguir la igualdad de
derechos y de oportunidades, a la par de los hombres. Así, Elvira Dellepiane
de Rawson, Cecilia Grierson y Alicia Moreau de Justo, siguiendo el ejemplo
de sus pares europeas, comenzaron a fundar, entre el 1900 y 1910, una serie de
agrupaciones en defensa de los derechos cívicos de la mujer. Como ser en el año
1907 crearon el “Comité Pro Sufragio Femenino”.
La gran
precursora del voto femenino fue Julieta Lanteri, que en 1910 solicitó a
un juez nacional que se le otorgaran sus derechos como ciudadana, incluso los
políticos, haciendo lugar el juez Claros a su petición y de este modo el 26 de
noviembre de ese año ejerció su derecho al sufragio, siendo la primera iberoamericana
en votar. También amparada en un fallo judicial, en 1919 se presentó como
candidata a diputada nacional, por el Partido Centro Independiente, obteniendo
1730 votos sobre un total de 154.302
De
la mano de Eva Perón, las mujeres adquieren el derecho de elegir y de
que se visualice su representatividad, al poder ser elegidas. Solo enumerando
algunas de sus participaciones: creó el “Sindicato de Trabajadores de Radio”
del que fue elegida Secretaria General, siendo una de las pocas mujeres en
conseguir acceder a la conducción de un Sindicato. Como así también creo en
1949 el primer partido político exclusivo conformado por mujeres: El Partido
Peronista Femenino.
En 1991 fue aprobada la Ley de Cupo, que amplió las
posibilidades de participación real de las mujeres, y en el año 2000 se amplió
su aplicación para las elecciones directas del Senado de la Nación. Con ello,
en el año 2005 la participación de mujeres en el Congreso Nacional fue de
43,66% en el Senado y 33.46% en Diputados. El aporte cualitativo que significa
esta representación de las mujeres en el Congreso Nacional, promueve leyes y proyectos
de inclusión y equidad social, como ser: leyes de salud sexual y procreación
responsable, leyes nacionales y provinciales sobre violencia familiar; ley de
jubilación anticipada, de educación nacional; registro de deudores morosos de
cuotas alimentarias, modificación de tipologías discriminatorias del Código
Penal, etc.
La Ley de Cupo Femenino Sindical sancionada en
2002 también llevó a que se avance en la paridad de género llevando así la participación
directa de las mujeres sindicalistas a todos los niveles, desde el nivel de
delegada sindical, hasta ser elegidas como miembros de la conducción.
Siguiendo
con esta línea, nuestro Sindicato es pionero en la inclusión y participación de
mujeres en la actividad sindical, actualmente conformada nuestra Comisión
Directiva en un 30% por cupo femenino y un 33% de delegadas de nuestra Seccional.
Como así también en la misma medida la conducción de nuestras Secretarías. Tenemos
además representación en la Secretaría de la Mujer de la Mesa Directiva
Nacional con dos de nuestras compañeras. Sigamos adelante para que más
compañeras se acerquen a este espacio y así tener un Sindicato más equitativo e
inclusivo.